Nuestras voces tienen el poder de la denuncia, del recuerdo, de la creación... La juventud no nos excede: nos estimula. Somos como una brújula que oscila por la realidad dejando huellas (que no son poco), plasmándolas en papel, llorando letras...La tinta es nuestra aliada;

este blog solo la excusa..

Tenemos mil cosas más para torturarnos↓

lunes, 30 de agosto de 2010

Congelar el tiempo. El mayor de los anhelos. Poder capturar con todo el detalle un momento de satisfacción. Plenitud. Vigor. Sensación que llena cada parte del cuerpo. Desde la cabeza hasta la punta de los pies, pero aún así excede estos extremos. Contemplar. Pensar y meditar. Sólo mirar.
Desear que la imagen se guarde intacta en la mente. En la eternidad, para siempre.

No hay comentarios: